Artículo de "Sindicato Regional de Luz y Fuerza" 2006

El Chubut

La Legislatura del Chubut sancionó el 9 de Noviembre de 2006, por unanimidad un proyecto de ley aprobando, en todos sus términos, el Convenio Colectivo de Trabajo celebrado entre el Sindicato Regional de Luz y Fuerza de la Patagonia, la Federación Chubutense de Cooperativas de Servicios Públicos y la Subsecretaría de Servicios Públicos de la Provincia. El nuevo instrumento, acordado de conformidad con las atribuciones establecidas por la Ley de Paritarias, fue homologado por la Subsecretaría de Trabajo del Chubut. La norma sancionada dispone asimismo la comunicación de las actuaciones labradas con motivo de ese Convenio Colectivo de Trabajo, a los fines del cálculo de los topes indemnizatorios previstos por el artículo 245 de la Ley de Contrato de Trabajo, al Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social de la Nación. Numerosos Dirigentes y Trabajadores de Luz y Fuerza observaron el desarrollo de la sesión desde uno de los palcos superiores del recinto parlamentario. Y aplaudieron desde las barras la votación que unió a los diputados del PJ, la UCR y el PACH. El Secretario General Luz y Fuerza, Héctor Rubén González, acompañado por otros dirigentes, mantuvo previamente encuentros con los legisladores del oficialismo y la oposición que comprometieron el tratamiento sobre tablas de ese tema de singular interés para los Trabajadores de ese ámbito provincial. "Por primera vez vemos que un convenio se trata, como nos decía hoy la gente del Sindicato, sin estar en un conflicto fuerte sino por la negociación de las partes que han arribado a este acuerdo", graficó el Diputado Radical Omar Morelli. El PACH, a través del diputado Ricardo Irianni, adelantó su voto favorable pero planteó objeciones al artículo 103 del nuevo instrumento legal, que establece que todos los Trabajadores incluídos en el Convenio Colectivo, aún aquellos que no son afiliados a Luz y Fuerza, tienen que pagar una cuota a modo de "contribución solidaria". "Este artículo es profundamente injusto y perjudica a los trabajadores", opinó Irianni. El Diputado justicialista Juan Domingo Perón le respondió mencionando "el costo que lleva tener un Convenio Colectivo de Trabajo, porque a los afiliados le sale un costo la defensa de esto, que es en beneficio de todos, afiliados o no afiliados", motivo por el cual argumentó que "es necesario que todos los Trabajadores contribuyan por la defensa que se les hace".

Los aportes de Luz y Fuerza se quedan en el Sindicato Regional
La "Caja Sindical"

Una prolija operación del sindicalismo lucifuercista que atravesó sin estrépito el Parlamento chubutense podría convertirse en la base de un nuevo diseño político y económico del gremialismo patagónico, cada vez más alejado de las cúpulas sindicales nacionales.
Los Diputados, sancionaron el nuevo Convenio Colectivo de los Trabajadores de Luz y Fuerza, una norma que permitirá anclar en la región los voluminosos aportes que antes eran transferidos a la cúpula nacional del gremio y que nunca retornaban en obras, programas o acciones de importancia para los Trabajadores Patagónicos.

Transferencia de poder
La arquitectura del operativo armado cuidadosamente por los dirigentes lucifuercistas que lidera Héctor Rubén González pasó casi inadvertida para la mayoría de los políticos y observadores vernáculos, aunque no para los popes del gremio, más conocidos como "Los Gordos", que saltaron en las poltronas de sus lujosos despachos metropolitanos.
En términos concretos, la medida constituye una significativa transferencia de poder político y económico a los lucifuercistas chubutenses, que les permitirá, incluso, dejar los espacios que ocupaban en la grilla de la estructura burocrática nacional.
No es un dato menor, si se tiene en cuenta que la iniciativa podría derramarse en todo el escenario sindical regional, generando una realidad inédita en la historia del gremialismo patagónico y su relación con los caciques que controlan desde Buenos Aires los fondos originados en los aportes locales.

Pertenencia regional
Fuentes consultadas por esta Columna admitieron que se trata de una "caja muy pesada" que será destinada a inversiones que mejoren las prestaciones sindicales en la región. En ese sentido, deslizaron, por ejemplo, la posibilidad de darle a los Jubilados, que aportaron toda su vida, un aporte solidario, construir hoteles en los enclaves turísticos, cosas que nunca se pudieron desarrollar porque los fondos eran enviados a Buenos Aires y se escurrían en las administraciones del sindicalismo nacional y volvían migajas.
Este desenlace legitima la presunción de que los sindicatos locales se fortalecerán económicamente, lo cual le dará una notoria independencia política. Por otra parte, no pocos sospechan que de esta matriz podría germinar un novedoso sentimiento de pertenencia al sindicalismo regional.

Datos del proyecto
El convenio "será de aplicación a todos los trabajadores, obreros y empleados de las cooperativas y de la Subsecretaría de Servicios Públicos provincial, cuya función profesional sea la producción, generación, transporte, transmisión, distribución y comercialización de la energía eléctrica, tanto en el proceso de producción como en el de transformación en sus diversos aspectos, comprendiendo además todas aquellas actividades de carácter auxiliar, accesorio, complementario, secundario o afines y es fruto, reitero, de una negociación colectiva que se lleva adelante en el marco de la Ley de Paritarias", dijo el diputado Negrete al fundamentar el proyecto.

Especulaciones
Quienes tuvieron acceso a la entretela del trámite no descartan que en la arquitectura del mismo haya participado el actual Subsecretario de Trabajo, Jerónimo García, un histórico dirigente de Luz y Fuerza que al tomar la decisión de labrar este camino rompió con 'los gordos', de quienes en alguna época fue uno de los jóvenes dirigentes predilectos. Podría deducirse, entonces, que esta construcción supone una apuesta casi definitiva del Subsecretario al sindicalismo regional.